Super User

Super User

El pasado mes ha sido muy seco: el segundo febrero más seco del siglo y el tercero desde el comienzo de la serie en 1961. Los tres febreros más cálidos del siglo se han producido en estos tres últimos años, siendo el de 2022 el tercero de ellos. También ha sido el octavo más cálido desde 1961.

El pasado mes de febrero ha sido muy seco, con una precipitación media sobre la España peninsular de 10,9 mm, un 21 % del valor normal del mes (periodo de referencia: 1981-2010); esto lo convierte en el segundo febrero más seco del siglo, tras el del año 2020, y el tercero desde el comienzo de la serie en 1961. Así se recoge en el balance climático mensual de AEMET.

Tabla resumen del comportamiento pluviométrico de febrero de 2022

Tabla resumen del comportamiento pluviométrico de febrero de 2022

Febrero ha sido entre seco y muy seco en toda la Península y Baleares, llegando a ser extremadamente seco en Baleares, áreas de Castilla y León, Aragón y la confluencia de Navarra, País Vasco y La Rioja. Por otra parte, en Canarias tuvo carácter en general, normal salvo en Gran Canaria donde mostró carácter seco e incluso húmedo en algunos puntos del norte de las islas más occidentales.

La precipitación acumulada en febrero fue inferior al valor 25 % del valor normal en toda la Península y Baleares. En Canarias, la precipitación solo superó los valores normales en el norte de Tenerife y noreste de Gran Canaria.

Porcentaje de la precipitación acumulada en febrero de 2022 respecto de la media 1981-2021

Porcentaje de la precipitación acumulada en febrero de 2022 respecto de la media 1981-2021

En cuanto a efemérides destaca la alcanzada en Logroño-Aeropuerto en donde la precipitación mensual recogida (1,6 mm) fue la más baja registrada para un febrero dado.

El tercer febrero más cálido del siglo

El mes de febrero ha tenido en conjunto un carácter muy cálido, con una temperatura media en la España peninsular de 8,9 ºC, 1,9 ºC por encima de la media de este mes (periodo de referencia: 1981-2010). Ha sido el tercero más cálido del siglo XXI, teniendo en cuenta que los tres febreros más cálidos de este siglo se han producido en estos tres últimos años; también se ha tratado del octavo febrero más cálido desde el comienzo de la serie en 1961.

Febrero fue cálido o muy cálido en la mayor parte del sur y este de la península, y predominantemente cálido en el cuadrante noroeste, si bien resultó normal en algunas zonas de la meseta norte y entre normal y frío en puntos del litoral mediterráneo andaluz. En Baleares tuvo un carácter cálido en Mallorca y Menorca y normal en Ibiza y Formentera, mientras que en Canarias mostró un carácter variable de unas zonas a otras, resultando en conjunto muy cálido.

Tabla resumen del comportamiento térmico de febrero de 2022

Tabla resumen del comportamiento térmico de febrero de 2022

Las anomalías térmicas más destacadas se sitúan en +2 ºC en amplias zonas del centro y oeste de Andalucía, Extremadura, Madrid, Castilla-La Mancha, montañas de Castilla y León, Aragón, Cataluña y mitad norte de la Comunitat Valenciana, llegando a superarse los +3 ºC en puntos del Pirineo. Prácticamente no se registraron anomalías negativas excepto en algunos puntos del litoral andaluz y algunas zonas altas de Canarias.

Anomalías térmicas en febrero de 2022

Anomalías térmicas en febrero de 2022

En febrero hubo un contraste marcado entre las temperaturas máximas y las mínimas diarias, debido a la persistencia de las situaciones anticiclónicas. Las máximas se situaron 3,1 ºC por encima de la media, mientras que las temperaturas mínimas quedaron 0,6 ºC por encima de la media, resultando una oscilación térmica diaria 2,5 ºC superior a la normal del mes.

En relación a efemérides, en las estaciones principales de Rota, Girona/aeropuerto y Teruel la temperatura máxima del mes resultó la más alta de febrero desde el comienzo de las respectivas series. Asimismo, en la estación de Morón de la Frontera la media de las temperaturas máximas diarias fue la más alta para un mes de febrero desde el comienzo de la serie.

 

Fuente: AEMET

Lo que ocurra con el clima tiene, inevitablemente, una dimensión humana. Algo que aparece con contundencia en el último informe publicado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas. Miles de hojas entre las que científicos de todo el mundo traducen los cambios en los ecosistemas de los próximos años para conocer qué impactos directos tendrán sobre nuestros modos de vida.

El documento va más allá de los escenarios que plantea el cambio climático en cuanto a incendios forestales, olas de calor o aumento del nivel del mar. Cientos de expertos ponen el acento en cómo el calentamiento global está provocando ya migraciones masivas y cómo está poniendo en peligro aspectos como el suministro de alimentos y de agua. Y, sin embargo, asegura el informe, el déficit de financiación para hacer frente a todo esto es cada vez mayor.

Lo más preocupante de todo esto es que estas últimas advertencias que ha lanzado la ciencia, a pesar de no ser algo nuevo, sí revisten mayor gravedad. Especialmente, por el aumento de las temperaturas, porque ya estamos en 1,1ºC y el límite de 1,5ºC, aquel que nos separa de escenarios naturales peligrosos, podría alcanzarse en la próxima década.

Las consecuencias más directas, reza el documento, podrían originar daños irreversibles y podría generar aún más dificultades para controlar las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera. Si –como advierte la ciencia–, aumentan los incendios, aumenta la deforestación, se secan los pantanos y se derrite el permafrost, será difícil detener el calentamiento global.

No obstante, a pesar de este escenario tan crítico que presentan los expertos del IPCC, el documento lanza, si cabe, un mensaje aún más relevante, y es que los próximos 10 años son la clave para evitar los peores escenarios que plantea el cambio climático en el mundo. "Cualquier retraso adicional en la acción global anticipada", dice el informe, "perderá una ventana de oportunidad breve que se cerrará rápidamente para asegurar un futuro habitable y sostenible para todos".

Ya estamos en 1,1ºC y el límite de 1,5ºC, aquel que nos separa de escenarios naturales peligrosos, podría alcanzarse en la próxima década

El texto hace hincapié en las diferentes consecuencias según la región del mundo de la que se trate y, como en todo conflicto o situación adversa, quienes más van a sufrir los impactos de esta crisis climática son los países desfavorecidos. Pero esto no es algo que quede en las regiones más desfavorecidas. El resto del planeta tampoco se salva, y lo que vive ahora Madagascar puede convertirse en una suerte de tráiler de lo que puede ocurrir en otras partes del mundo. 

En Europa, sin ir más lejos, y en España, en particular, el cambio climático puede tener un impacto importante en los próximos años en, al menos, cinco aspectos que van desde la salud mental a los problemas en la producción de cultivos. Y todos ellos generarán en nuestro país un enorme coste social y económico.

La energía, en el punto de mira

El sexto informe del IPCC hace hincapié en uno de los aspectos que ahora mismo, y en plena guerra económica con Rusia, está pasando a la primera línea de debate, como es la energía. En España, particularmente, el precio de la luz alcanzó picos históricos el pasado año, algo que se está viendo ahora también incrementado como consecuencia de la situación geopolítica con Ucrania.

No obstante, este aspecto, el de la energía, es uno de los que más preocupa a los expertos del IPCC, porque, como aseguran, "el sector de la energía en Europa ya se enfrenta a los impactos de los extremos climáticos". Y no sólo porque la demanda va en aumento, sino también porque, en los últimos 20 años, se han observado reducciones e interrupciones del suministro eléctrico en años excepcionalmente secos o cálidos.

El informe señala a países como España y asegura un escenario bastante fiable en el que la demanda total de energía se incrementará. Como consecuencia del aumento de temperaturas en los próximos años, se necesitará más energía para climatizar los edificios. Una demanda que, ya para 2035, podría llegar a duplicarse.

Una España más seca con menos agua y cultivos

Los expertos del IPCC señalan otro de los riesgos clave a los que habrá que hacer frente en los próximos años. Solo con un aumento de 1,5ºC de la temperatura media global, países europeos como España podrían presentar "pérdidas sustanciales de producción agrícola"

En este escenario de calentamiento persistente se podría desplazar la producción agrícola hacia regiones del norte. No obstante, aseguran, que ni siquiera las posibles ganancias que se den en esta región de Europa podrían compensar las pérdidas ocasionadas.

Además, señalan que la capacidad de adaptación mediante riego se verá cada vez más limitada por la falta de disponibilidad de agua. El cultivo del maíz, por ejemplo, podría bajar hasta un 80% en nuestro país. Pero este es sólo un ejemplo de la situación en la que pueden encontrarse muchas de las tierras del sur de Europa, donde al menos el 80% sufrirá más episodios de sequías.

Otro de los aspectos que señala el informe es que España dispondrá de menos agua para consumo, con al menos unas siete millones de personas en situación de escasez de agua. En este sentido, no sólo la sequía podría aumentar los daños en un 250% en nuestro país, sino que además, más de la mitad de la población estará expuesta a un estrés hídrico. Si las emisiones se redujesen, este impacto podría reducirse hasta en un 18%.

8.000 muertes por calor

Nuestro país será uno de los más afectados por el aumento de las temperaturas que prevén los expertos del IPCC. Las olas de calor podrían producirse cada año y de una manera más intensa y en una ventana de tiempo más larga. El impacto más preocupante de este fenómeno meteorológico es que puede aumentar el número de fallecidos por estos episodios. En total, a mitad de siglo, las muertes por calor podrían pasar de suponer las 1.500 a 8.000.

El documento señala también que el aumento de las temperaturas puede ocasionar que países como España se conviertan en el hábitat ideal de mosquitos que transmiten virus como el chikungunya, con síntomas de fiebre y dolor fuerte en las articulaciones.

Además, en este punto es necesario recordar que las personas sin hogar y aquellas con dificultades económicas serán especialmente vulnerables a episodios extremos como las olas de calor que se prevén en países como España.

Las olas de calor podrían producirse cada año y de una manera más intensa y en una ventana de tiempo más larga

Así las cosas, el aumento de temperaturas también elevará el riesgo de incendios forestales cada vez más intensos y peligrosos. En el entorno de la región mediterránea, si no se reducen las emisiones, el informe prevé que al menos se queme el 87% de su superficie

El calor, por tanto, supondrá también una amenaza clara para la biodiversidad. También en los océanos, donde el aumento de la temperatura de sus aguas puede acabar por extinguir las praderas marinas para el año 2050.

 

Inundaciones y daños en infraestructuras

Países como España destacan también por ser un territorio con más de 8.000 kilómetros de costa. Esto, que puede suponer una suerte si se mira por el lado de los recursos y el turismo, también guarda una cara B en un escenario de crisis climática. Y es que somos uno de los países más vulnerables de Europa al aumento del nivel del mar.

En zonas como Barcelona o Cádiz, podría aumentar en torno a los 30 centímetros para el año 2050. Esto convierte a nuestras costas, muchas de ellas edificadas, en pasto de las inundaciones. 

Sobre todo en un escenario en el que el IPCC prevé que aumenten tanto la intensidad como la frecuencia de los temporales, los que pueden hacer que el agua se adentre aún más metros de lo normal. Y es que, con 20 centímetros o 30 centímetros más, las olas pueden penetrar entre 20 metros y 30 metros más hacia el interior.

Salud mental

Aunque no se trató de un evento causado por el cambio climático, en España experimentamos con la erupción de La Palma el impacto que puede llegar a tener un fenómeno natural en nuestras vidas.

El IPCC tampoco se ha olvidado de la salud mental, que señala que en Europa puede ser especialmente preocupante. Los eventos climáticos extremos tales como inundaciones, incendios o temporales intensos pueden desencadenar casos de estrés postraumático, ansiedad o depresión. Algo que han documentado, sobre todo, tras los recientes episodios de inundaciones en Europa.

Además, los expertos apuntan que hay pruebas emergentes en toda Europa de que los jóvenes pueden estar ya experimentando ansiedad por el cambio climático, aunque todavía, aseguran, no se conoce cuán extendido está o su gravedad real. 

No obstante, la calidad del aire también afecta a la salud mental. En zonas como el norte de Italia, por ejemplo, el número de visitas psiquiátricas de emergencia diarias se ha relacionado con la calidad del aire.

Fuente: ElEspañol

Este programa contiene 257 medidas orientadas a evitar o reducir los potenciales impactos y riesgos derivados del cambio climático en España, implica a 18 ministerios, además de diversas agencias estatales y organismos autónomos, y conlleva inversiones por valor de más de 1.500 millones de euros

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) ha aprobado el primer programa de trabajo del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC), que contiene un amplio paquete de acciones orientadas a evitar o reducir los potenciales impactos y riesgos derivados del cambio climático en España.

España se enfrenta a importantes riesgos derivados del cambio climático debido a un conjunto diverso de razones. Entre ellas a su situación geográfica, en el límite entre el continente africano y europeo, a la presencia de dos archipiélagos y a la importancia para nuestra economía de sectores muy dependientes del clima como la agricultura, el turismo o el transporte.

Este programa de trabajo contiene la letra pequeña que permitirá desarrollar el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático en los próximos años. En él se definen medidas concretas a aplicar en un amplio conjunto de ámbitos de trabajo, incluyendo la salud humana, el agua, el sector primario, el patrimonio natural y la biodiversidad, la ciudad, el urbanismo y la edificación, la energía, el transporte o la industria y los servicios, entre otros.  

El programa es el resultado de un intenso trabajo de colaboración y tiene un marcado carácter práctico, contribuyendo al cumplimiento de uno de los compromisos acordados en la Declaración de Emergencia Climática y Ambiental: la adaptación de nuestro país a los impactos del cambio climático.

El programa establece cuáles son las organizaciones responsables o colaboradoras para el desarrollo de cada una de las medidas e incluye una serie de indicadores de cumplimiento que facilitan el seguimiento y la evaluación de las acciones llevadas a cabo. Entre las medidas recogidas se contempla la mejora de la red de observación para la predicción y vigilancia de eventos meteorológicos extremos, la reactivación del Observatorio sobre Salud y Cambio Climático o la integración del enfoque adaptativo en la planificación hidrológica o en la conservación del patrimonio natural y la biodiversidad.

También se incluyen medidas para reforzar los mecanismos de información, coordinación, asesoramiento científico, seguimiento y evaluación, que permitirán que los esfuerzos de adaptación sean socialmente más justos, territorialmente coherentes y basados en la mejor ciencia disponible.  

Fuente: MITERD

La productividad agrícola en la región mediterránea podría caer hasta un 17 % para 2050 a causa del cambio climático si se mantiene un nivel alto de emisiones de CO2, advierte un informe del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU.

El sexto informe de evaluación del IPCC, que este grupo de especialistas climáticos ha publicado este lunes y que actualiza desde 2014 lo que se sabe acerca del calentamiento global y sus efectos, señala que la mediterránea es una región de “relativa alta vulnerabilidad” frente ala crisis climática, aunque con “grandes asimetrías” e impactos más severos en el sudeste.

El documento prevé una reducción de las aportaciones hídricas en la cuenca Mediterránea de entre un 4 y un 8 %, un riesgo que será inevitable “con acciones o sin ellas”, asevera en rueda de prensa Jofre Carnicer, uno de los 270 autores del informe -científicos de 67 países diferentes- y especialista en impactos climáticos en el Mediterráneo.

“Tenemos que trabajar en la adaptación”, insiste por su parte Marta Rivera-Ferre, coautora del capítulo 8 y también experta en esta temática, que recomienda medidas como el incremento de la materia orgánica en los suelos para mejorar su rendimiento y, al mismo tiempo, favorecer la mitigación, pues se incrementaría su capacidad de secuestrar carbono.

Rivera-Ferre subraya en concreto el “riesgo elevadísimo” proyectado para el sudeste español, que -recuerda- es “la canasta de producción de verduras europea”, y destaca la dificultad para transformar y diversificar un modelo agrícola dominado por el monocultivo, como es el de Europa, y donde la producción intensiva “ha degradado los suelos”.

Todo el continente europeo experimentará pérdidas de producción agrícola a lo largo del siglo XXI, anuncia el IPCC, costes que no se verán compensados por las ganancias que podrían observarse en los países nórdicos.

Escasez hídrica

Si el planeta se calienta 2 ºC desde los niveles preindustriales para 2100 -los compromisos de reducción de emisiones que los gobiernos han adoptado llevan al mundo hacia un calentamiento de 2,7 ºC, según la ONU-, más de un tercio de la población del sur de Europa vivirá con escasez hídrica, lo que impactará negativamente a su seguridad alimentaria, su salud y su economía.

Si se alcanzan los 3 ºC de calentamiento, la cifra de personas expuestas a la falta de agua se duplicará hasta dos tercios de la población del sur de Europa, alerta el informe, que es una llamada a la acción urgente «sin mayor dilación» a través de “medidas transformadoras” de mitigación y de adaptación para paliar los impactos de la crisis climática.

Así, aunque algunas consecuencias ya son inevitables, su magnitud y alcance difieren según los niveles de calentamiento: por ejemplo, el número de muertes y de personas en riesgo de estrés térmico podrá ser hasta tres veces mayor en un escenario de 3 ºC (siempre respecto al periodo 1850-1900) que en el recomendado de 1,5 ºC.

Fuente: EFEVerde

La Niña, el fenómeno natural que propicia un enfriamiento anómalo del Pacífico oriental cercano a la costa sudamericana, podría estar detrás de la grave sequía que afecta a países como España y Marruecos y estados del oeste de Estados Unidos y, de momento, se podría alargar hasta bien entrada la primavera

Las sequías que se dan de forma simultánea en el mismo hemisferio pueden estar relacionadas entre sí por efecto de La Niña, y cuando esto sucede, está documentado que suele haber una serie de impactos a nivel global que afectan a la circulación atmosférica, favoreciendo patrones estacionarios climáticos en diferentes lugares de La Tierra .

En el caso concreto de la Península Ibérica, y tras varios meses sin apenas lluvias, se puede empezar a pensar que La Niña es la que provoca este patrón tan seco y persistente, aunque la vinculación solo lo podrá determinar un estudio posterior», explica a EFE Juan Jesús González, físico, investigador en dinámica atmosférica y portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Este fenómeno natural causa cambios notables en las temperaturas globales y, especialmente, en los regímenes de lluvias a nivel global y forma parte del ciclo de Oscilación del Sur de El Niño (ENOS), que se caracteriza por las fases cálidas y frías de las condiciones oceánicas y atmosféricas en el Océano Pacífico tropical.
Para González, esta situación de escasez de lluvias, aún no se puede atribuir al cambio climático: «la sequía es una característica intrínseca del clima peninsular y este periodo de ausencia de lluvias, que ya alcanza mes y medio, es más o menos normal; lo que es anormal es lo que apuntan las predicciones de que hasta marzo, de momento, no se vé un claro escenario de lluvias».

Sequía España

El actual periodo de sequía en España es la consecuencia de un bloqueo anticiclónico que provoca una ausencia prolongada de precipitaciones, además de una fuerte oscilación térmica, con más de 25 ºC de diferencia entre la temperatura máxima y la mínima en algunos puntos.

Si la lluvia tardara en llegar podríamos empezar a hablar de algo «anómalo«, detalla el experto en dinámica atmosférica para quien, sí finalmente se contabilizaran tres meses consecutivos de ausencia de lluvias, lo que habría que empezar a preguntarse es si el cambio climático está detrás de esa situación.

Otros países 

Esta situación de sequía está afectando también a otras zonas del globo, incluso de manera «más notable», especialmente en las que están más cerca del Océano Pacífico, como pueden ser el oeste de los Estados Unidos y países de Latinoamérica, pero también en Marruecos.

El reino aluita, al estar tan cerca de España, se encuentra fuertemente influenciado por los patrones climáticos peninsulares, y a día de hoy, afronta su peor sequía de las últimas tres décadas con un déficit de precipitación del 53 % respecto a la anterior temporada.

 

Fuente: EFEVerde

España y Portugal piden a la CE movilizar fondos por la sequía

Los ministros de Agricultura de España y Portugal plantearon a la Comisión Europea (CE) la grave situación causada por la sequía en sus países y la posibilidad de movilizar fondos comunitarios para apoyar al sector.

El comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, señaló en Twitter que se reunió con los dos ministros, el español Luis Planas y la portuguesa Maria do Céu Antunes, en los márgenes de la reunión informal de titulares del ramo que se ha celebrado en Estrasburgo.

«Discutimos el impacto de la inusual sequía invernal en la agricultura y qué tipo de fondos se pueden movilizar para apoyar al sector», explicó Wojciechowski.

Antunes señaló que España y Portugal quieren incluir este tema en la agenda de la próxima reunión de ministros de Agricultura y Pesca, que se celebrará en Bruselas el día 21 de febrero.

El pasado 1 de febrero, el Gobierno de Portugal anunció la restricción de uso de varias presas utilizadas para la producción de electricidad y de uso agrícola a causa de la sequía que afecta a Portugal continental.

La decisión fue anunciada en rueda de prensa por el ministro de Ambiente luso, João Pedro Matos Fernandes, y la ministra de Agricultura, Maria do Céu Antunes, y responde a las previsiones del Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera, que indican que «existe una probabilidad del 80 %» de que 2022 sea un año seco.

Antunes anunció ese martes que han contactado con la Comisión Europea para «reforzar y simplificar los avances» de apoyo a los agricultores para afrontar esta situación.

Asimismo, ha garantizado que hay agua suficiente para animales y cultivos, aunque por el momento se limitará a cuotas mínimas el uso de agua para la producción de electricidad en las presas de Alto Lindoso/Touvedo, Alto Rabagão, Vilar/Tabuaço y Cabril y Castelo de Bode, todas ellas de EDP y en el norte y centro del país. 

Fuente: EFEVerde

 Informar a todos los usuarios de la herramienta que recientemente se ha llevado a cabo una nueva actualización del Visor de Escenarios de Cambio Climático de AdapteCCa mediante la cual se han incorporado diversas novedades, entre ellas:

  • OBSERVACIONES: El conjunto de datos observados AEMET-OBS pasa a incluir datos diarios, lo que permite consultar un total de 27 índices, en vez de los tres disponibles en la versión anterior.
  • DATOS EN ESTACIONES: Las proyecciones desarrolladas por AEMET (datos por estaciones) se diferencian según el método de downscaling empleado (SDSM / Análogos).
  • COBERTURA GEOGRÁFICA: Se incorporan los datos correspondientes al Principado de Andorra, tanto para observaciones puntuales como para las proyecciones de EUROCORDEX (Datos en rejilla).
  • DESCARGA DE DATOS: se ha añade la opción de descargar los datos contenidos en la aplicación a través de un servicio THREDDS, que se complementa con un nuevo documento para el uso correcto de estos datos diarios.
  • FORMACIÓN: A través del apartado de información del visor se podrá acceder a los materiales de las diversas acciones formativas que se vayan incorporando en el Aula Virtual de AdapteCCa y que estén relacionadas con escenarios regionalizados de cambio climático y con el propio visor. Entre las acciones formativas que ya se pueden consultar se encuentra el taller Escenarios climáticos regionalizados para el diseño de políticas, medidas y acciones de adaptación al cambio climático, desarrollado en el marco del Plan de Transferencia, Intercambio y Gestión de Conocimiento para el Desarrollo de la Cooperación Española en América Latina y el Caribe -INTERCOONECTA- en octubre 2021.

El Visor de Escenarios de Cambio Climático de AdapteCCa, desarrollado en el marco del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climatico (PNACC), es una herramienta de fácil acceso para conocer, visualizar y descargar las proyecciones más actualizadas del clima futuro de nuestro país. Desde su lanzamiento en 2018 recibe de media más de 1.000 visitas al mes, y se actualiza periódicamente para que continúe siendo una herramienta adecuada y versátil que responda a las necesidades de la comunidad española de adaptación. En este sentido, el nuevo PNACC 2021-2030 contempla entre sus líneas de trabajo continuar poniendo a disposición pública los escenarios climáticos regionalizados (Escenarios-PNACC) a través de este visor, mediante su mejora y actualización a partir del mejor conocimiento disponible.

Fuente: AdapteCCa

 

La consejera de Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García, ha presentado las nuevas ayudas para instalaciones de autoconsumo en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la UE, con un presupuesto de 13’9 millones de euros para 2022 y 2023.

La consejera ha detallado que ciudadanos particulares, las comunidades energéticas, las comunidades de propietarios, las empresas, cualquier entidad sin ánimo de lucro y cualquier institución pública puede participar en los beneficios de la autogeneración de energía y solicitar las ayudas públicas.

El objetivo es que estos fondos sirvan de palanca de cambio en los hábitos sostenibles de los extremeños en la producción y en el uso cotidiano de la energía. Se trata de una convocatoria plurianual, que estará abierta durante los años 2022 y 2023 y que se compone de seis programas de incentivos según la actuación a subvencionar.

 

Las solicitudes, que pueden presentarse a partir de mañana, se tramitan mediante el uso de medios electrónicos para una mayor seguridad y agilidad en el procedimiento administrativo. Serán atendidas por riguroso orden de presentación hasta el agotamiento de los fondos y los expedientes serán concedidos atendiendo a cuando los mismos estén completos y cumplan los requisitos.

Ha anunciado la puesta en marcha una Oficina de Información en la Agencia Extremeña de la Energía en la que se atenderán todas las consultas sobre las instalaciones, sean técnicas, normativas o de tramitación, y se orientará a los consumidores sobre los pasos a seguir.

 

BALANCE AUTOCONSUMO 2021

El director general de Industria, Energía y Minas, Samuel Ruiz, ha explicado que, durante 2021, las instalaciones de autoconsumo en Extremadura crecieron un 194 por ciento.

En conjunto en Extremadura, a finales de 2021, estaban puestas en servicio 1.918 instalaciones con una potencia de 29,4 MW.

 

El Decreto publicado en el DOE puede consultarse íntegro en: DOE n.º 16- 25-enero-2022 (juntaex.es)

Enlace noticia: Extremadura lanza su mayor convocatoria de ayudas al autoconsumo con 13,9 millones (regiondigital.com)

 

Lunes, 24 Enero 2022 13:32

Aemet, 2021: año muy cálido y seco

Balance climático anual 2021, un año muy cálido y seco

  • El pasado año ha sido el octavo más cálido de este siglo en España 
  • Ha sido el quinto año más cálido a nivel mundial y los siete últimos años han sido los más cálidos del planeta desde el inicio de la serie, a mediados del XIX
  • El año pasado también fue seco en nuestro país: la precipitación acumulada fue inferior al valor normal en la mayor parte de España

La Agencia Estatal de Meteorolgía (AEMET), que depende del Ministerio pata la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, acaba de hacer público el balance climático correspondiente al 2021.

Las temperaturas máximas diarias se situaron en promedio 0,4⁰C por encima del valor normal, mientras que las temperaturas mínimas diarias fueron 0,5⁰C superiores a las normales, resultando una oscilación térmica diaria 0,1⁰C inferior a la normal.

Del análisis de los datos se desprende que en 2021 hubo dos olas de frío: la primera, de corta duración, se extendió entre los días 5 y 8 de enero, mientras que la segunda, de intensidad excepcional, se observó entre los días 11 y 18 del mismo mes, después de las nevadas de la borrasca Filomena.

En cuanto a altas temperaturas, en 2021 se registraron dos olas de calor en la península ibérica y Baleares y tres en Canarias. Las temperaturas más altas de 2021 se observaron durante la ola de calor de mediados de agosto.

En general, el año 2021 fue seco en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 569 mm, un 89 % del valor normal del mes, resultando de caracter extremadamente seco en Extremadura, entre otras regiones.

Fuente: MITERD

Enlaces: 

https://www.miteco.gob.es/es/prensa/ultimas-noticias/2021-un-a%C3%B1o-muy-c%C3%A1lido-y-seco/tcm:30-535105

https://www.miteco.gob.es/es/prensa/220117ndpbalanceclimatico2021_tcm30-535097.pdf

 

El Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) ha publicado los datos preliminares de la serie 1990-2020 del Inventario Nacional de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero y otros Gases contaminantes. Estos datos, presentados hoy en la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos (CDGAE), muestran que el nivel de emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI) a nivel nacional para el año 2020 ascienden a 275,3 millones de toneladas de CO2-eq, lo que supone una disminución del 12,4% con respecto al año 2019, y se sitúa en 2020 en un -5,2% con respecto a 1990 y en un -37,8% que en 2005.

En un año marcado por el impacto de la COVID y las medidas adoptadas para hacer frente a la pandemia, esta disminución de emisiones vino determinada por la reducción del 19% en las emisiones en el transporte y por el descenso en la demanda de energía eléctrica del 5,5 %. También ha contribuido a esta reducción de emisiones el aumento en la producción de energía renovable (44 % del total de electricidad generada en 2020 en España), debido sobre todo al incremento en el último año del 23,9% en la producción hidráulica y del 65,4% en la producción de solar fotovoltaica. Este aumento se ha visto acompañado de una menor producción de los ciclos combinados, que han generado un -20,3% menos que en el 2019, y de las centrales de carbón, que han representado tan sólo el 2% del mix.

En cuanto a la industria, hay reducciones generalizadas en la mayoría de los sectores, lideradas por un descenso de la producción de aluminio primario y de la producción o transformación de metales no férreos. Todo ello se traduce en un descenso de las emisiones de GEI de la industria del -9,3%. También contribuyeron a este descenso, aunque en menor medida, la reducción de las emisiones en el uso de gases fluorados (-13%) y el sector residuos (-0,5%).

Puede acceder al documento resumen de gases de efecto invernadero a través de este enlace

Fuente: MITECO

Página 11 de 17